Declaración final del III Congreso Mundial contra el Neoliberalismo en la Educación
El congreso reunió a educadores y estudiantes de diferentes países en noviembre en Río de Janeiro
Trabajadores de la educación, educadores populares y estudiantes de América Latina y del mundo, reunidos del 11 al 14 de noviembre de 2024 en la Universidad Estatal de Río de Janeiro, Brasil, proclamamos nuestra irrestricta determinación de defender una educación pública, presencial, gratuita, popular, científica, laica, democrática, feminista, antirracista, ecológica y transformadora de la realidad social.
Durante cuatro días, discutimos la importancia de las cuestiones raciales, de género y de clase en la construcción de una educación emancipadora, en la que los sindicatos de trabajadores de la educación y el movimiento estudiantil organizado desempeñan un papel central. Discutimos y denunciamos los riesgos de la digitalización acelerada de los sistemas escolares y universitarios, que no va acompañada de la equidad social y del aumento de la financiación pública de la educación. Dialogamos convencidos de que la educación híbrida, sin que el Estado financie la conexión a Internet y proporcione equipamiento adecuado a los trabajadores de la educación y a los estudiantes, constituye un nuevo modelo de privatización de la educación. También analizamos los riesgos de intentar convertir la inteligencia artificial en un régimen de «verdad humana», así como los problemas generados por la deshumanización de la educación a distancia mediante formatos de aprendizaje exclusivamente virtuales y estandarizados.
Analizar el impacto de los proyectos conservadores en la educación fue una de las principales preocupaciones de este congreso mundial, especialmente cuando sus paradigmas tratan de imponerse en los sistemas escolares y universitarios. La defensa de la laicidad, la libertad de ideas, la educación sexual integral, el derecho a decidir libremente sobre nuestros cuerpos y el reconocimiento de la diversidad sexual, étnica y la negritud se ven seriamente amenazados por el neoconservadurismo educativo. Entendemos y reafirmamos que la única forma de enfrentar este peligro es con más democracia y pensamiento crítico en la educación.
Estos desafíos presentan nuevas y renovadas demandas para los movimientos sindicales, de clase y estudiantiles en la educación. La perspectiva de clase es poderosa porque profundiza en la democracia participativa, el control social y la rotación laboral, principios heredados de la Comuna de París.
Tenemos mucho que aprender de los movimientos sociales del siglo XXI, especialmente del feminismo y del ecologismo, que han encontrado formas de movilizarse y disputar la hegemonía. Por eso nos atrevemos a soñar con una jornada mundial de movilizaciones por el derecho a la educación, una utopía en la que estamos trabajando y con la que estamos comprometidos. Iniciamos un diálogo global para que el 8 de octubre de 2025 sea el punto de partida de convergencias que unan energías, conciencias e ideas, movilizando al mundo entero por una educación pública al servicio del pueblo y no del capital.
Escuchamos a nuestros hermanos y hermanas de diferentes territorios, que nos mostraron cómo el neoliberalismo adopta innumerables rostros para imponer la mercantilización, la privatización y una cultura de evaluación neoliberal.
Quedó claro que, en todas partes, la construcción de la resistencia antineoliberal ha sido eficaz en la medida en que hemos logrado crear amplios frentes sociales de apoyo que convergen en la movilización. En esta dirección, voluntad, conocimiento y conciencia crítica se combinan para avanzar.
No hay movimiento sindical o estudiantil que sea ajeno al movimiento pedagógico y a la disputa de ideas. Son dinámicas interconectadas que se inscriben en una forma diferente de concebir la educación, el aprendizaje, la valorización del saber y del conocimiento que promueve la justicia social. Por eso nos comprometemos a acompañar, impulsar y fortalecer el movimiento pedagógico dentro de nuestros sindicatos para que, a partir de sus reflexiones e ideas, podamos construir propuestas alternativas consistentes y radicales.
Crearemos un sistema propio de formación, publicaciones y comunicación, basado en la experiencia de Otras Voces en Educación y en las iniciativas que cada sindicato ha desarrollado a lo largo del tiempo. Investigación, Educación, Comunicación y Organización (INVEDECOR), trabajando conjuntamente, servirán de paradigma para el trabajo que realizaremos en este campo. En 2025 pondremos en marcha nuestra iniciativa editorial, de formación y comunicación, que complementará el trabajo realizado en los territorios.
Nuestra historia de convergencia no ha hecho más que empezar. Hemos decidido volver a reunirnos en 2026 en el IV Congreso Mundial contra el Neoliberalismo en la Educación, cuya sede se anunciará en abril de 2025. Mientras tanto, seguiremos adelante con las Conferencias Internacionales del Sindicalismo Clasista y Autónomo, junto con el Movimiento Pedagógico y Estudiantil, que tendrán lugar en abril de 2025 en México, en octubre del mismo año virtualmente, y presencialmente en Quito, Ecuador.